La mayoría de las ciudades y pueblos que Riviera ofrece desde su collar de perlas fueron fundadas por los griegos: Aspalathos (Split), Tragurion (Trogir), Epetion (Stobrec), Issa (Vis), el casco antiguo de Hvar (Pharos), mientras los romanos nos dejaron Salonae (solin), Oneum (Omis) , Pitunium (Podstrana).
Debido a las invasiones de los avaros y esclavos en el siglo 7, la Dalmacia romana se redujo de inmediato a las ciudades y pueblos mencionados anteriormente. Formalmente, estaban bajo la jurisdicción del emperador Bizantino en la época de los reyes croatas Petar Kresimir IV y Zvonimir Dmitar en el siglo 11, quienes unieron esas ciudades al resto del territorio croata.
Después de la caída de la dinastía nacional Croata, el reino de Croacia y Dalmacia entro en 1102 en una unión con Hungría. Ladislay de Anjou vendió Dalmacia en 1409 a los venecianos, y las ciudades de Dalmacia destacaron por una fuerte y excelente organización, que posteriormente las llevo a ser las ciudades mas poderosas del Mediterráneo.
En el siglo 16, los residentes locales estaban expuestos a diario a posibles ataques turcos, asique construyeron nuevas fortificaciones, murallas, torres y multitud de paredes. Venecia resistió con éxito esos ataques, pero agotado por todas las guerras durante estos siglos, dejaron de existir en 1797. Ese año sus territorios en el Adriático quedaron bajo el dominio Austriaco , que en tan solo 104 años fortaleció la vida económica y cultural de la zona.
Durante el turbulento siglo 20 , donde se produjeron 3 guerras, las ciudades de la Riviera de Split se proclamaron a si mismos los luchadores libres.
Ha habido numerosos conflictos históricos, pero los gobernantes de diferentes países han dado a esta zona y a sus habitantes numerosas costumbres populares, atracciones culturales, eventos y mucha diversidad étnica.
Es de hecho, el valor real de la zona de Split, a partir del cual, después de que lo visites, aprenderás mucho y no dudaras en volver a por mas.